Helen iba caminando.Estaba bien. el sol relucía y eso le permitía ponerse sus pantalones cortos y su camiseta de tirantes favoritas para hacer deporte. Iba escuchando música , como siempre , pues odiaba hacer deporte sin música.
Después de un rato andando , se sentó en un banco.
su pelo negro recogido en una cola , sus ojos verdosos y su sonrisa apagadas , sin vida , sin color... había llorado mucho por el amor.
No veía si no era con sus ojos , no sonreía si no era con su sonrisa y eso la estaba apagando poco a poco. De repente un anciano se sentó a su lado.
la miro a los ojos y dijo :
- Helen , ¿ves el sol?, hoy brilla para tí. Tienes unos ojos preciosos para ver y una sonrisa radiante que enseñar.. ¿porque no lo olvidas?. No te apagues , porque mientras que haya un poquito de luz , ya no habrá oscuridad. No te aferres a ese amor que no valío la pena , aférrate a esa luz que todavia te queda. En la lucha se gana y se pierde. No tienes que luchar por ganar siempre , tienes que luchar porque si pierdes, habrás ganado algo por muy pequeño que sea ,aunque no te des cuenta. Sal , diviertete , sonrie , !brilla¡ Ahora es tu momento... ¿porqué no?.
